viernes, 28 de diciembre de 2012

Hilando

Ya te dije adiós. Y hoy te lo vuelvo a decir, te digo adiós.

Que nos quedamos unidos, que te llevas un pedazo de mi alma, eso es verdad. No sé si tú hayas dejado un trozo en la mía, espero que sí.

Quizá no fue mucho el tiempo que pasamos juntos, y quizá nunca te dije que te amo (tal vez sí lo dije). Pero yo sentí que fue una eternidad y a veces temo que pase más el tiempo y te vea más lejano, más imposible... me da miedo que comience a olvidarte.

Cuando hablamos en la cama juntos. Cuando recorriste los lugares de mi espalda. ¿Cómo dejo eso en el pasado? Y todo lo que me enseñaste.

Pero hoy... hoy te vuelvo a decir adiós de nuevo. Hoy te puedes ir para siempre mientras me trago mis lágrimas. 

Ya no sé cómo más despedirte, ya llevas camino. 


sábado, 15 de diciembre de 2012

Partimos al amanecer

La sangre de tu culpa que me corre por los dientes y que me limpio hacia la oreja izquierda. 

Cállate.

Y sí, dejo de llorar, pobre estúpida, en qué estoy pensando. A quién le importan mis lágrimas. Normal, todo está bien, nada pasará. ¿Por qué me haces esto? Perdón, fue mi culpa. No tenías que golpearme tan fuerte para entender la verdad, ¿acaso tenemos que pasar por esto cada estación? Perdóname. 
Ya, como si te abrocharas de regreso el cinturón, regresa la lámpara y la mesita a su lugar, las otras cosas que me lanzaste. Esconderé los moretones para mañana.

Partimos al amanecer.

¿Y quién quiere salir con este clima? Ya sé que no te importa, perdón. ¿Me dirás que es necesario, verdad? Te odio. Me odio. Está bien, lo siento. Me dispararé en el pie. Limpiaré la sangre, esconderé los huesos rotos y mañana me pondré un largo vestido y sonreiré y saludaré a todos nuestros amigos. 

¿Qué quieres hacer para el resto de la noche? Seré lo que quieras que sea. 
Ya no tengo sangre en la cara ¿ves? Ya no me sangra la nariz. Verás en qué bonito vestido me cambio, blanco, limpio, sin gotas de culpabilidad. 

Volveré a empezar, hoja blanca.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Él nos llevará

No, está bien.
Dejaré de reir para que podamos estar en la cama juntos.
Seré seria y no te irás. 

Recordaré el pasado que tu quieras, olvidaré lo que quieras que olvide. Estaremos juntos.

Comeré lo que me des, beberé lo que me ofrezcas, fumaré lo que fumes e inhalaré lo que tu quieras que inhale sobre tu piel acostada sobre nuestras sábanas cuando estemos juntos y unidos.

Mataré mis amores por los tuyos, viviré para ellos. Seré su alimento si te quedas conmigo. No partas porque yo seré lo que tu quieras que sea, la razón por lo que te quieras quedar.

Escribiré lo que quieras que escriba, pintaré lo que quieras que pinte, gritaré lo que quieras que grite y en la última noche me transformaré en lo que quieras que sea con la finalidad de que no te vayas, de que seas feliz conmigo y me quieras por siempre a tu lado.

Sola dejaré que me lleve el viento. Sola dejaré que me seque el sol en donde tú me dejes. Sabré que no volverás a buscarme y no envejeceré en tu ausencia. Sola ya no estaré, ya no seré. Por eso haré lo que sea porque te quedes. Aunque sea sin ti, pero que sea cercano a mí. Que no tenga que cruzar las lágrimas gigantes para sentirte cerca. 

Quisiera ver tus rizos otra vez.